El Diletante Guacho Fané

En el seno del sufrimiento hallé el sendero secreto del deleite...

domingo, diciembre 24, 2006

recuerdo de un atardecer en Chascomús

En la escalera

Escalones hay
En la oscuridad,
la escalera va
bordeando el vacío;
un cuerpo cayó
allí, por el hueco:
oigo el alarido.

Silencio, estás solo
silencio, no hay nadie

Aplastándome
contra la pared
repito mi nombre;
hasta que en perdido
eco, se extravía.

Silencio, estás solo
silencio, no hay nadie

Otro cuerpo cae
se oyó otro alarido
su eco en el hueco;
mi cuerpo a tientas
en la escalera
clava sus uñas en la pared.

Silencio, estás solo
silencio, no hay nadie

(Leónidas Lamborghini, en Encontrados en la basura)